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Blog Capítulo 05 Homo Emotionalis (contenido extra)

Somos animales (IV): la agresividad.

Los humanos tenemos una capacidad de cooperación dentro de nuestro grupo, tan alta como la agresividad hacia otros grupos

“…el hombre es un ser naturalmente bueno, amante de la justicia y del orden; no hay de ningún modo nada de perversidad original en el corazón humano, y los primeros movimientos de la naturaleza son siempre rectos.”

J.J Rouseau

“El hombre es un lobo para el hombre”

T. Hobbes

Desde el inicio de los tiempos el ser humano ha discutido si la naturaleza humana es, en si misma, mala o buena. Para los seguidores de Rouseau es la civilización la que convierte al ser humano en malvado, mientras que los seguidores de Hobbes piensan que la maldad es innata en nuestra especie.

Sabemos, por modelos animales, los sistemas cerebrales que están implicados en la respuesta agresiva. Ver figura

El conocimiento de las bases biológicas de la agresividad, siendo muy importante, no permite explicar muchos de los fenómenos de la agresividad que se dan en la sociedad actual.

Para entenderlos mejor debemos diferenciar lo que se denomina agresividad pro-activa, de la agresividad-reactiva o defensiva .

La agresividad ofensiva o proactiva. Se produce básicamente porque dos individuos de la misma especie pelean por un estímulo ambiental (comida, una hembra) o luchan por el territorio.

 La agresividad defensivao reactiva. Se produce como reacción ante una situación de amenaza o peligro. Los investigadores suelen diferenciar dos tipos de agresividad defensiva. Una más sumisa y otra más asertiva.

Comparados con los chimpancés, los humanos tenemos un alto grado de agresividad pro-activa (igual que el chimpancé común) pero un bajo grado de agresividad reactiva (diferente del chimpancé común y del bonobo).

 FRECUENCIA AGRESIVIDAD PRO-ACTIVA  FRECUENCIA AGRESIVIDAD REACTIVA (DEFENSIVA)
  CHIMPANCÉ    ALTA  ALTA
  BONOBO    BAJA    ALTA
  HUMANO    ALTA   BAJA
Diferencias entre la agresividad pro-activa y la agresividad reactiva entre el chimpancé común el bonobo y el ser humano (adaptado de Wrangham 2019)

Esto último es lo que nos permite convivir en grandes poblaciones todos juntos con un nivel de tolerancia bastante aceptable. Es también lo que explica que la agresividad entre-grupos (guerras) se multiplique de forma imparable desde los inicios de la civilización.

Otro tema de interés es en qué medida los diferentes trastornos mentales pueden predisponer o no a la agresión y las consecuencias legales. Un resumen de esto aparece en la Tabla.

Trastorno PsiquiátricoTipos de agresividad más frecuente  Posibles mecanismos implicadosConsecuencia Legal
Lesiones cerebrales   Enfermedades degenerativas (demencia)  Episodios esporádicos de irritabilidad. Sin conciencia de enfermedad.Destrucción de los sistemas frontales de control de impulsosPuede ser eximente
Trastornos psicóticos   EsquizofreniaAgresión defensiva ante personas que sienten como amenazas (paranoia). Sin conciencia de enfermedad.  Alteración de los sistemas que controlan la percepción de la realidad y la conciencia.Puede ser eximente
Abuso de alcohol o sustanciasArranques de cólera sólo en el momento de consumo. Conciencia de enfermedad (a veces amnesia del episodio).  Inhibición de los mecanismos de control del lóbulo frontal. Activación directa de sistemas de agresividad-impulsividad.Puede servir de atenuante
Trastorno Explosivo IntermitenteArranques de cólera episódicos. Conciencia de enfermedad  Disfunción crónica de los mecanismos de control de impulsos (no base cerebral reconocida)  No sirve de eximente ni atenuante
Trastorno Límite de Personalidad  Pérdida de control con conductas auto- y hetero-agresivas. Conciencia de enfermedad.  Disfunción crónica de los mecanismos de control de impulsos (no base cerebral reconocida )No sirve de eximente ni atenuante
Trastorno de Personalidad Antisocial  Conductas repetidas de agresión, ausencia de empatía. Conciencia de enfermedad.  Posible disfunción en el lóbulo frontal (no suficientemente probada)No sirve de eximente ni atenuante
Los diferentes trastornos mentales en que pueden producirse conductas agresivas

Una revisión divulgativa que escribí, hace ya algunos años, sobre la agresividad

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